John Doe Entrevista

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31 octubre, 2020

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Pasamos por la tierra de los Califas y hablamos con Jhon Doe, banda de carretera que acumula en sus flight cases kilometro a kilometro un sonido personal, propio, Rock con ramificaciones a otros lares que encallan y a la vez fluyen como herida abierta tras el paso por las tablas de aquellos escenarios que pisan, haciendo testigos a los que se acercan a sus bolos, del auténtico sabor del directo de esta banda Córdobesa que suda por cada poro de su piel el alma que plasman en sus canciones.

Por Mary Cruz García Madrid.

1..- La primera en la frente… ¿De qué se alimenta John Doe? ¿Cuáles son sus musas y sus demonios?

Carlos: A decir verdad, nuestra forma de buscar la inspiración no se si es muy original. En lo que respecta a la música, escuchar mucha, diversa y de manera compulsiva, lo típico, intentar no dejar de acumular influencias, recursos… y en base a eso según «nos coge el cuerpo» va saliendo la cosa. Dejamos un poco la puerta abierta a la incertidumbre en nosotros mismos, evitamos ser previsibles. En las letras tiramos un poco de análisis de comportamientos y sentimientos propios o ajenos expresados más o menos finalmente.

Kanijo: Como dice Carlos, la base es escuchar y escuchar y escuchar, lo nuevo, lo viejo, lo normal, lo diferente… Rara es la semana que alguno no pasa un enlace a un concierto o recomienda un disco. Y al final, pues de todo ese batiburrillo de música, algo se te pega e inconscientemente se plasma a la hora de tocar o componer alguna canción. Por otro lado, nos gusta mucho el ensayo/error, cuando un tema parece que está completo siempre le intentamos buscar una vuelta más para que tenga su propio carácter y probamos cosas diferentes. A veces se quedan y otras no.

2.- ¿Por qué John Doe y no otro nombre?

Carlos: JOHN DOE es el nombre que se usa en Norteamérica para referirse a alguien anónimo de quién desconocemos su identidad. Otro significado también en la misma línea es que sería el equivalente en Castellano a «Fulano de tal», «Mengano»… Con esto no quiero decir que la banda no tenga identidad, es más simple, el nombre salió en la misma pelea por buscar nombre, cuando no se te ocurre nada… Uno hace la coña con lo de «los sin nombre» o «anónimos», y en ese momento otro está ágil lo asocia a lo del concepto John Doe antes mencionado y ya está, habemus nombre.

Kanijo: Básicamente es eso, es un latazo elegir un nombre para lo que sea y surgió así. Y no estará mal elegido cuando da para pregunta en una entrevista (Risas)

3.- Power trío… ¿o qué?

Carlos: Muy sencillo, tres componentes, menos problemas de espacio en locales pequeños, de logística, a la hora de ponernos de acuerdo… por otra parte, musicalmente también nos resulta más grato a cada uno poder centrarnos en buscar un sonido más personal del instrumento al estar menos supeditado a lo que hagan los otros integrantes. No nos gusta compartir jeje.

Kanijo: Muchas veces no es necesaria mucha gente para formar alboroto (risas). Cada uno en nuestro instrumento buscamos el punto para que suene todo redondo y lleno, para que no se eche en falta nada y eso también nos obliga a estar muy pendientes los unos de los otros cuando componemos o tocamos, para que el tema siga teniendo consistencia.

4.- ¿Qué significa llevarse la segunda edición del Recycle de Córdoba?

Carlos: Pues nos quedamos un poco con los conciertos que dimos en las distintas fases de concurso porque las condiciones técnicas y humanas fueron inmejorables, luego por nuestra parte encontramos la satisfacción en el hecho de que al no preparar los concursos como algo excepcional, sino como un concierto más en el que pones las mismas ganas que en cualquier otro, se premie lo que somos en esencia y no una pantomima que montemos para una noche.

Kanijo: Fue una inyección de moral importante por eso mismo, porque lo preparamos igual que cualquier otra noche que vayamos a tocar. También tuvo su puntito especial, para qué negarlo, Carlos y yo empezamos en Recycle con nuestra primera banda y guardamos muchos y muy buenos recuerdos de toda la familia Recycle y quieras que no, que gente que valoras y en la que te has mirado alguna que otra vez, te reconozca el esfuerzo, es muy bonito.

5.- ¿Qué guardais de una banda llamada Requiem?

Carlos: Requiem nos abrió los ojos ante un panorama hostil que ahora más o menos seguimos intentando gestionar. Fue la banda con la que empezamos a salir a tocar de nuestra ciudad, dentro de que era Rock potente, no pretendíamos parecernos a nadie o pertenecer a un género reconocible, eso nos perjudicó bastante en cuanto a que parece que no interesa pararte a escuchar nada a lo que no tengas la oreja acostumbrada, o te lo impida no sé qué tipo de prejuicio que a día de hoy sigo sin entender.

Kanijo: Pues mucho cariño, fue una banda que nos hizo crecer mucho a todos los que formamos parte de ella. Hubo muchas anécdotas y cosas muy buenas, pero también tuvo su contraparte negativa. De todas formas, lo que queda son las experiencias, tanto buenas como malas, que son las que te hacen crecer y prepararte ante los contratiempos que puedan venir. Siempre pasa algo, pero por lo menos que no sean dos veces lo mismo (risas).

6.- Volviendo al tema de los concursos, fuisteis segundos en el Lagarto Rock de 2018, ¿qué pasa que lo ganáis todo? (Risas)

Carlos: Que va, Ojalá jeje, como te comenté antes, nos tomamos los concursos como un bolo más. Intentamos mantener un nivel a base de tocar en directo todo lo que nos permite el panorama, teniendo una rutina de conciertos durante prácticamente todo el año. De manera que, si surge un concurso, vamos sin nervios a echar un buen rato y lo mismo, con suerte se rasca algo.

Kanijo: ¡Anda que no hemos “palmao” concursos! Ese fue especial porque en la fase de votación recibimos mucho apoyo por parte de gente en redes sociales, así como en la calle, de gente que nos conocía… Yo creo que fue el premio a la cabezonería (risas). Además, tocar en un recinto tan grande, con tantísima gente, es todo lo contrario a lo que estábamos acostumbrados, así que fue bastante enriquecedor y es un recuerdo que va a estar ahí acompañándonos.

7.- Y a colación de la anterior pregunta, ¿cómo veis la calidad de las bandas en la escena actual?

Carlos: Hay de todo, independientemente del estilo hay gente con mucha sensibilidad y mucho gusto; gente con oficio y honestidad y por otro lado gente que se agarra a la estética y a la pose pero musicalmente aportan 0.

Kanijo: Como dice Carlos, hay de todo porque tiene que haberlo. Ahora mismo la escena no es los garitos o los festivales. La escena se monta en las redes sociales a base de apariencia, visitas, likes y reproducciones. Hay veces que todo eso va acompañado de contenido y otras veces que es una cáscara vacía.

8.- Carlos, tú y tu flying… tu flying y tú… (técnicas, pasiones, sonidos conseguidos, etc.)

Carlos: Es la Guitarra que más me ha gustado de siempre, y a día de hoy lo sigue siendo por estética y obviamente por sonido, se puede tocar de todo con ella. Uso cuerdas de calibre alto (0.12 – 0.62), bastante separadas del mástil. No utilizo púa, me encanta el Fuzz… en cuanto a estas movidas que te comento, obedecen a mi propia comodidad, gusto, manías personales… vamos que no lo hago de esa manera porque lo haga tal o cual guitarrista. Y Más allá de técnicas, principalmente, es el oído lo que intento que me funcione, escucho todo lo que puedo y de manera casi inconsciente se van añadiendo detalles de unos u otros a mi repertorio. Y el estilo… Rock/Blues/Soul/Funk en un orden totalmente aleatorio. Referentes demasiados… hoy por ejemplo te podría decir Johnny Winter.

9.- Kanijo, ¿cuáles son tus influencias y tus amplificadores favoritos?

Kanijo: Pues mis amplificadores y bajos favoritos son los míos, porque no hay un duro para que me gusten otros (risas). Ahora mismo para John Doe estoy utilizando un Lakland de 4 cuerdas, aunque siempre he venido usando bajos de 5, sobre todo el Warwick que lleva conmigo 13 años. En cuanto al ampli, siempre tengo mucho en cuenta la comodidad a la hora del transporte y la logística de los escenarios. Al tocar normalmente en sitios pequeños y con bastante carretera de por medio, no me puedo permitir el lujo de llevar un frigorífico de 3 puertas para un bolo (risas). Llevo varios años usando un Markbass que no pesa nada y es bastante aceptable de tamaño y por ahora no lo cambio por nada.

En cuanto a bajistas, pues hay cientos de bicharracos por ahí sueltos, aunque yo me suelo fijar en el bajista según lo que haga en el tema o para el tema más que en la individualidad del músico. Se puede ser técnico y espectacular, pero si no agarra la canción, algo está fallando. Pero como influencias más destacadas de siempre, Tim Commerford de RATM, Robert Trujillo (hasta que entró a Metallica, jaja) y así seguiría la lista hasta el infinito.

10.- Vuestro primer trabajo fue grabado por Mart, ¿qué os aportó esa experiencia?

Carlos: Ya habíamos grabado en ocasiones anteriores con él en la era Requiem, tenemos amistad desde hace años, también ha visto un poco nuestra evolución y aprendizaje desde que nos conocemos y creo que es un poco consciente de lo que nos gusta escuchar. Por supuesto valoramos y admiramos sus trabajos, con su banda, grabando a otras, un genio en el plano artístico y técnico… Entonces, como entenderás, tanto proceso como resultado, acaba siendo muy satisfactorio.

Kanijo: Mart es amigo nuestro desde hace muchos años, sabe cómo sonamos y cómo le gustaría a él que sonase. Partiendo de esa base, hace un trabajo acojonante aunando los dos conceptos. Además, siempre está abierto tanto a aportar cosas como a escuchar lo que tengas que decir a la hora de enfrentarse a un tema en el estudio, no es para nada cuadriculado, pero siempre ve algo que los demás no hemos visto y ahí es donde está su magia en gran medida.

«Cambiar el mundo» con la colaboración de MART

11.- ¿Qué supuso la partida de Jaime, vuestro primer batería?

Carlos: A nivel musical obviamente un cambio en la ejecución con la batería, cada uno toca de una manera con sus gustos y preferencias, pero siempre en el contexto de la banda y ahí la línea compositiva no se ha visto muy alterada por el cambio. En lo personal, al deberse el cambio a circunstancias propias de la vida de cada uno pues seguimos manteniendo con Jaime el mismo sentimiento de amistad de siempre.

Kanijo: Como cualquier cambio, siempre te paras un poco a analizar las opciones que hay y ver por donde lo vas a atacar, por decirlo de alguna forma. Jaime avisó con tiempo de su situación y pudimos buscar soluciones entre los tres, por eso el ritmo de la banda en directo apenas se vio afectado. De hecho, durante un tiempo Jaime y Rafa estuvieron “cohabitando” (risas). A nivel personal, el cambio fue que ahora nos vemos menos, pero seguimos en contacto y manteniendo una buena relación.

12.- El paso hacia un sonido más funk se debió…

Carlos: Somos una banda en esencia de Rock, quizás a lo largo de nuestras vidas es lo que más hemos consumido, pero a la par que vamos cumpliendo años hemos ido ampliando el espectro, y el funk ha tomado quizás en los tres un protagonismo similar. Es un poco lógico que eso también se extrapole a nuestra música.

Kanijo: Yo creo que es natural que el sonido de la banda vaya evolucionando. Ya no somos los mismos que hace dos o tres años, y no me refiero a miembros, si no individualmente. La banda tiende a crecer con nosotros. Ese cambio de sonido no fue nada orquestado ni preparado, simplemente surgió, nos gustó y lo adoptamos como parte del sonido de la banda. Creo que quedarse siempre en un mismo cubículo solo te deja dos alternativas: o se está forzando o no se está creciendo como banda ni como individuos. Nosotros somos más de dejar salir las cosas y ver qué pasa (risas).

13.- ¿Qué ha traído el nuevo batería a la formación?

Rafa: Como un batería joven que soy, aunque lleve ya años en el asunto, admiro a gente que es mayor que yo, de los que puedo aprender. En mis inicios tocaba lo que cualquier muchacho joven empieza escuchando cosas como The Offspring, Limp Bizkit, etc. En este caso tanto Carlos como Kanijo son unos años mayores y por lo tanto tienen más conocimiento musical, al igual que Jaime, de los que he aprendido buenos ritmos y buenas técnicas de sus discos ya grabados con la banda.

Como aporte principal creo que lo más importante es mi versión más metalera en los temas que estamos creando, que tienen su parte funk o más relajada como yo le llamo, y también partes ahora más duras menos técnicas que le dan una potencia extra para hacer bailar a la gente, que es con lo que realmente se disfruta!

14.- Indomable es…. (descripción con despliegue)

Carlos: Indomable es lo último que grabamos en estudio, hace ya unos 3 años con Rafa Castilla, y supone ese giro hacia el funk antes mencionado, bueno, más que giro, el aporte de determinados matices que acercan nuestro Rock un poco más al Funk.

Temas no excesivamente largos, con estructuras no demasiado complejas, en los que pretendimos que primase un poco el groove…

Kanijo: Yo creo que lo hicimos un poco más a lo que nos pedía el cuerpo en cuestión de estructura y demás, dejando esa parte a las sensaciones más que otra cosa y dándole protagonismo al “rollo” de la canción. Es un trabajo del que estamos bastante orgullosos y que estamos deseando de dejar de calificar como “el último” (risas).

15.- Sois de Córdoba, una ciudad rendida a la música con eventos como el Festival de la Guitarra, ¿cómo la veis volcada con el rock?

Carlos: A día de hoy no mucho la verdad, percibimos que aquí en general la música está relegada a una posición de mero entretenimiento y no como una muestra de arte o cultura. No hay un hábito de ir a un concierto a escuchar rock original simplemente por placer de echar un buen rato de música en vivo independientemente de la banda que toque. Pocos locales donde tocar. Iniciativas hay, pero creo que realmente no son trascendentes para que haya una escena en la ciudad, de hecho, gente que tenía banda, lo ha dejado o la tiene en stand by mientras se dedican a las versiones de pop de la movida y tal…

Kanijo: Está volcada, pero como un coche patas arriba (risas). Hay pocos sitios donde acojan a bandas de temas propios, sean del estilo que sean, y por norma general la afluencia a los conciertos no es el mejor dato que cabría esperar. En realidad, creo que el problema viene de más adentro, que es un problema de índole educacional y cultural que llevamos arrastrando bastante tiempo como sociedad y se va acusando con el tiempo. Vas a otros lugares y ves sitios que el público va porque hay un concierto. Yo he llegado a escuchar aquí lo contrario, “no vayamos a tal sitio que hay concierto”. Ignoro el motivo, pero me parece bastante preocupante a todas luces…

16.- ¿Cómo veis el panorama ante la nueva situación? ¿Tenéis algún plan de ataque?

Carlos: El panorama… incierto, esperamos que para mediados finales de verano en nuestro ámbito de Pubs y locales pequeños la situación empiece a despegar, lógicamente con determinados protocolos de seguridad. Por nuestra parte, echarle paciencia y en cuanto se pueda, volver a nuestra rutina de garitos, también tenemos intención de grabar, que por otra parte ya va tocando y tenemos material de sobra.

Kanijo: Como dice Carlos, esto es una incertidumbre. Nadie sabe por dónde va a salir la cosa, así que nuestro plan es seguir componiendo, ensayando, preparando y cuando se pueda, volver al directo. Cuando llegue ese día, pues ya veremos qué añadimos a la ecuación, pero por ahora lo importante es que todo siga por buen camino.